Nuestra cultura es rica en tradiciones hermosas y uno de los lugares más significativos para contraer matrimonio sin duda alguna es San Miguel de Allende. 
Ubicada en Guanajuato, esta ciudad arrastra consigo historia, cultura y tradiciones, siendo así una de las opciones favoritas para los novios. 

En este post, queremos compartir contigo una de las tradiciones más especiales de San Miguel; ¡Las Callejoneadas! Y lo haremos tomando como referencia la boda de Ibeth y Ricardo, quienes nos platicaron su experiencia y nos prestaron unas increíbles fotografías para que todas pudiéramos compartir este momento tan especial con ellos. 

Un día antes de la boda, los invitados son citados en la Plaza Principal alrededor de las 8:00pm, ahí es donde se preparan para tener una noche súper divertida que probablemente sea testigo de muchas anécdotas para después. El propósito de las Callejoneadas, a demás de unir a los invitados para "romper el hielo" es hacer un recorrido por los callejones principales y visitar puntos históricos de la ciudad mientras se hace una larga caminata que se convierte en festejo. 

Todo el recorrido es liderado por un burrito tequilero (sí, literalmente es un burrito) y una estudiantina o mariachi que se encarga de poner a todos los participantes de la Callejoneada a bailar mientras van degustando un buen tequila o mezcal en los porrones (son unos tarritos) que se les da al comienzo de la celebración. 

Otra parte súper especial y típica de las Callejoneadas son las mojigangas (así se les llama a unas figuras caricaturizadas gigantes de cartón) inspiradas en los novios. 

Si aún estás buscando lugar para tu boda, no dudes en colocar San Miguel de Allende en tus primeras opciones ¡te vas a volver a enamorar! 

¡Que vivan los novios!

- Love, Victoria.